Informe sobre la limpieza en el Aulencia

INFORME SOBRE LA LIMPIEZA

EFECTUADA POR LA DIRECCIÓN

GENERAL DEL MEDIONATURAL DE LA

COMUNIDAD DE MADRID, EN EL TRAMO

DE RIBERA COMPRENDIDO ENTRE EL

CAÑÓN DEL RÍO AULENCIA Y EL

ARROYO VALBELLIDO

(TÉRMINO DE COLMENAREJO)

(El informe original se acompaña de un extenso

dossier fotográfico que por cuestiones de espacio

no podemos reproducir en esta Web).

ALGUNAS CONSIDERACIONES PREVIAS

SOBRE LAS FUNCIONES DE LOS SOTOS

La determinante de la sucesión dinámica del ecosistema de ribera son las fluctuaciones del régimen hidrológico de los ríos. Si se alteran las condiciones naturales mediante la regulación de los caudales se produce una limitación en el aporte de sedimentos fértiles a las vegas que anula la dinámica sucesional de los sotos.

Entre otras funciones los sotos elevan la riqueza de especies y la heterogeneidad

paisajística y aumentan la diversidad.

Se comportan como hábitats de descarga evaporativa de agua subterránea en áreas de clima árido o semiárido( Gonzalez Bernáldez et al, 1985). Ello tiene que ver con la presencia y mantenimiento del microclima característico húmedo y fresco.

CRITERIOS DE CONSERVACIÓN APLICADOS A LOS SOTOS.

  • función ecológica en los ciclos vitales de especies higrófilas
  • fragilidad (la fragilidad evalúa la sensibilidad de las especies silvestres a cambios

ambientales)

  • fragmentación
  • conectividad
  • representatividad
  • rareza
  • riqueza de especies, diversidad de hábitats, valor potencial para la vida silvestre
  • valores estéticos relacionados con las preferencias paisajísticas humanas

POSIBLES ALTERACIONES PRODUCIDAS POR LOS TRATAMIENTOS REALIZADOS EN EL TRAMO DEL RIO

AULENCIA OBJETO DEL DIAGNÓSTICO

1) Perturbación en la demanda actual de los requerimientos de los ciclos vitales de las especies de fauna y flora higrófilas (alimentación, reproducción, apareamiento, migración y nidificación). Posible desaparición de especies presentes.

2) La fragilidad del medio inducida por la regulación del caudal en su cabecera debido al embalsamiento del agua así como el cambio en la dinámica sucesional derivada del mismo, se ve potenciada por fenómenos más localizados como los producidos por los tratamientos de “regeneración de márgenes de la ribera” realizados.

Este tipo de tratamientos forestales altera el sistema de refugios arbustivos y arbolados para la fauna. Modifica las condiciones de insolación al modificar la cobertura vegetal, sustituyendo las poblaciones existentes por otras de tipo fotófilas y nitrófilas.

La evaluación de los daños mediante muestreo de la presencia de especies orníticas no es recomendable, siendo preferible una estima de la riqueza de especies (Usher,1986).

En este sentido es recomendable ser prudentes y reconocer la ignorancia sobre la función ecológica que desempeñan los pequeños organismos como piezas de ensamblaje entre las interacciones de organismos mayores. Sin embargo considerando que, de 1.100.000 especies animales existentes en nuestro planeta el 92% son invertebrados, frente a un 5% de vertebrados, es evidente que perdemos más diversidad biológica con la pérdida de tan sólo el 1% de los invertebrados que con el 20% de los vertebrados ( Herrera, 1989).

FUNCIONES DE LOS SOTOS

Los sotos se identifican fácilmente en el paisaje por constituir una arboleda a la largo de la orilla de un río. Se habla de bosques de ribera o de galería cuando el aumento de la arboleda cubre superficies amplias de depósitos aluviales permitiendo la coexistencia de un mayor número de especies que se distribuyen en franjas paralelas a la orilla en función de sus requerimientos fisiológicos y de interacciones intra e interespecíficas.

En los sotos menos alterados se puede reconocer una estratificación horizontal característica.

La estructura de los sotos está condicionada entre otros factores por la naturaleza del sustrato, siendo determinante en la sucesión dinámica del ecosistema las fluctuaciones producidas por el régimen hidrológico.

Los sotos actúan modificando las características climáticas locales debido al alto nivel de humedad relativa producida por la contínua evapo-transpiración desde las superficies vegetales y el suelo. Elevan la riqueza de especies, la heterogeneidad paisajística y aumentan la diversidad.

La vegetación de ribera desempeña una función primordial frente a la erosión fluvial desarrollando un denso sistema de raíces que traba los aportes de los sedimentos arrastrados por el río o procedentes de las laderas vertientes de forma que se favorece su estabilización. Determinadas especies de sauces son, además, elementos activos al provocar la deposición de la carga de sólidos que el río transporta. Al sufrir el embate directo del agua, añaden al freno de la orilla y de las paredes del cauce un componente de rugosidad, producido por las ramas bajas, que disminuye la velocidad de la corriente y su energía potencial, frenando el arrastre y facilitando la deposición. (Monserrat, 1982).

Las plantas ejercen un efecto amortiguador al evitar la llegada de partículas en suspensión a las aguas, hecho que produciría un incremento de la turbidez a la vez que controlan la llegada de nutrientes. Los bosques de galería impiden la llegada de los rayos de sol de forma directa, evitando un sobrecalentamiento y reduciendo las oscilaciones térmicas excesivas, tanto estacionales como diarias (Samuel, Lee, 1976).

La entrada energética en forma de materia orgánica procedente sobre todo de las ramas y hojas de los árboles y arbustos de la ribera es mucho más importante que la producción primaria autóctona (Mann, 1975). La vía heterótrofa de los ríos de poca envergadura tiene un papel preponderante frente a la autótrofa

PRIMERA PARTE

CONSIDERACIONES TÉCNICAS Y CIENTÍFICAS

En el presente informe científico se describen someramente únicamente las observaciones efectuadas en visitas realizadas durante el mes de abril a la ribera del río Aulencia, así como las especies que de modo constatado por nosotros viven y crían en la zona, haciendo una primera valoración de los daños que se derivan de los trabajos de roza, clareo y poda llevados a cabo por la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid. Dichos trabajos han pretendido convertir un hábitat ribereño a proteger en una zona ajardinada y de esparcimiento —contradictorio con los objetivos marcados por la legislación vigente— lo que afecta a corto plazo a la cría y cobijo de algunas especies, y que posiblemente incidirá a medio y largo plazo sobre el ecosistema.

Efectos sobre la vegetación

El informe, remitido a la asociación Proyecto Verde vía Excmo. Ayuntamiento de Colmenarejo el 17 de Abril de 2000, por el Director General de Medio Natural, D. Juan del Álamo Jiménez, y firmado por D. José Luis García y D. Rafael Mosquera, intenta justificar la limpieza realizada en un tramo de las riberas del río Aulencia, calificándola de acción altamente beneficiosa para el medio, especialmente para las especies vegetales.

El tramo de bosque de ribera del río Aulencia que nos ocupa estaba formado fundamentalmente por árboles como los fresnos (Fraxinus angustifolia), sauces (Salix alba, S. atrocinerea, S. salvifolia), chopos (Populus nigra) y olmos (Ulmus minor). Había además numerosos arbustos y herbáceas tales como las zarzas (Rubus ulmifolius), majuelo (Cra -taegus monogyna), rosales silvestres (Rosa sp.), eneas (Arundo donax) y tifas (Typha dominguensis), juncos (Juncus sp.), así como el saúco (Sambucus nigra) que es una especie protegida. Muy cercanas al cauce y objeto también de tratamiento han sido las encinas (Quercus ilex ssp. ballota).

Todas estas especies han sufrido poda intensiva y, en algunos casos, su total desaparición en el tramo de río afectado por las obras. Se han eliminado ramas primarias de todas las especies mencionadas y, en ocasiones, pies enteros. Se han observado tocones vivos de árboles —Sambucus nigra (ver Anexo fotográfico) yPopulus nigra de gran tamaño. También se ha constatado la poda de ramas de encina de gran calibre (ver Anexo fotográfico), así como ramas primarias e incluso algún pie aislado de alguna encina joven.

Las zarzas, que constituyen el principal arbusto del soto, han sido cortadas a ras de suelo, al igual que algunos saúcos.

Un estudio detallado de este lugar, realizado el 5 de abril por miembros de la asociación ARBA, refleja la siguiente relación de especies de flora observadas en la zona (UTM 30TVK143833):

Alissum sp. Bellardia triago Epilobium sp.  
Alliaria petiolata Brionia dioica Erodium sp. Jasmirrum fruticans
Anagallis arvensis Calendula tripterocarpa Erophila verna Juncus sp.
Andryala integrifolia Carex sp. Ficus carita Juniperus oxycedrus
Arceutobium oxyce&ii Centrantus calcitrapa Fraxinus angustifolia Lamium amplexicaule
Aristolochia tonga Cheilantes acrostica Fumaría sp. Lamium purpureum
Arnoseris mínima Cinoglossum Genista hirsuta Lampsana communis
Arum italicum cheilantifolium Geranium lucidum Lavandula stoechas
Arundo donax Crataegus monogyna Geranium robertianum Lemna menor
Asparagus officinalis Daphne gnidium Geranlum rotundifoltum Lonicera sp. (dos)
Asplenium ceterach Digitales thapsi Hepatica sp.(semisumergida) Lupinus hispanicus(semisumergida)

 

  Osyris alba Rubus ulmifolius Scrophularia sp.
Jasminum fruticans Papaver sp. Thypha dominguensis Sedum caespitosum
Juncos sp. Parentucelia latifoila Rumex acetosa Silene alba
Juníperos oxycedrus Phagnalom rupestre Rumexbucephalophorus Silene dioica
Lamium amplexicaule Phyllirea angustifolia   Sisymbrium runcinatum
Lamium purpureum Picris sp. Rumex sp. Spergularia sp. (rubra)
Lampsana communis Pistacia terebintus Ruscus aculeatus Thymus mastichina
Lavandula stoechas Plantago afro Ruta graveolens Trifolium subterraneum
Lemna minor Plantago lagopus Salix alba Ulmus minor
Lonicera sp. (dos) Platicapnos sp. Salix atrocinerea Umbilicus rupestres
Lupinos hispanicus Populus negra Salix salvifolia Urtica dioica
Mentha sp. Quercus ballota Sambucus nieta Urtica minor
Ornitopus compressum Reseda luteola Sanguisorba minor Vicia sp.
Ornitopus perpussillus Retama sphaerocarpa Santolina sp. Viola kitaiveliana
Orobanche rapumgenistae Rhamnus lycioides Seolimus hispanicus  
  Rosa sp. Scrophularia sp.  

 

 

Efectos sobre la fauna

La destrucción de parte de la masa vegetal de las orillas del río, lleva asociada una perturbación sobre todos los animales que allí viven, bien sea porque constituye su refugio, fuente de alimento, o lugar de cría. Todo esto es más grave si, como en el caso que nos ocupa, las especies se encuentran protegidas por la ley.

Para la realización del “Plan de Ordenación de los Recursos Naturales para el curso medio del río Guadarrama y su entorno” editado por la Comunidad de Madrid, se llevaron a cabo trabajos de campo y bibliográficos gracias a los cuales se realizó una lista de la fauna existente en el río Aulencia. Destacamos que tan sólo de lepidópteros se relacionan 50 especies, no mencionándose ningún otro invertebrado. En cuanto a anfibios y reptiles la lista es de 19 especies, encontrándose 53 especies nidificantes de aves, 19 invernantes y 25 de paso u ocasionales. La lista de mamíferos asciende a 24 especies.

En las visitas realizadas al río Aulencia después de la limpieza efectuada por la Consejería, se ha constatado la presencia —o ausencia significativa— de animales, que a continuación se relacionan, directamente afectados por la poda masiva y que de un modo u otro han visto alterada su biología.

Invertebrados.

Los caracoles y babosas son una fuente de alimento de otros animales formando parte de la base de la cadena trófica. No se encontró ningún ejemplar vivo ni puestas de huevos.

No se observaron lombrices epigeas que habitan en la capa de hojarasca del suelo.

Se observaron un número muy reducido de artrópodos, observándose en la zona no afectada por la poda y a pocos metros de recorrido, gran variedad de especies.

Especial gravedad reviste la destrucción de numerosos pies de Saúco y la desaparición en la zona tratada del rusco (Ruscus aculeatus), especie rara en la provincia y no citada hasta ahora en los trabajos publicados (Revista Fontqueria XLI).

Por lo que concierne al aspecto técnico de la poda efectuada, se ha realizado con poco cuidado y excediendo la normativa vigente. Los cortes no han sido debidamente tratados, lo que en el caso de géneros tan sensibles a los hongos como Populus se traducirá en infecciones que pueden acabar con la vida del árbol en pocos años.

Anfibios.

Los anfibios observados, rana común (Rana perezi), sapo común (Bufo bufo), sapo corredor (Bufo calamita) se ven afectados, ya que la cobertura vegetal de las orillas les proporciona cobijo frente a los depredadores y protege sus puestas.

Reptiles.

Se observaron galápago leproso (Mauremys caspica), culebra de agua (Natrix natrix) y salamanquesa común (Tarentola mauritanica), que pueden ser depredados más facilmente, sobre todo por seres humanos. La cubierta arbustiva es imprescindible para este grupo de animales que regulan su temperatura alternando zonas de sol con zonas de sombra según sus necesidades. La puesta de galápago se verá muy afectada por la insolación directa de buena parte del cauce.

Aves.

Es uno de los grupos más afectado, ya que muchas de las especies se encontraban criando o comenzando la construcción de sus nidos. Se ha constatado la presencia en la zona de las siguientes especies:

Aves afectadas durante la cría:

  • Agateador común (Certhia brachydactyla): cría a finales de marzo entre la corteza desprendida y grietas de árboles.
  • Mito (Aegithalos caudatus): comienza la cría en marzo utilizando para instalar su nido principalmente las zarzas.
  • Pájaro moscón (Remiz pendulinus): comienza a principios de abril utilizando siempre ramas bajas y a ser posible que cuelguen sobre el agua.
  • Verdecillo (Serinus serinus): comienza la cría en marzo, anidando en arbustos.
  • Mirlo (Turdus merula): cría en marzo utilizando zonas espesas de arbustos y tocones con huecos.
  • Ruiseñor bastardo (Cettia cetti): cría a principios de abril en setos densos.
  • Curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala): comienza la cría en marzo sobre zarzas principalmente.
  • Carbonero común (Parus major): cría en marzo utilizando en muchos caso huecos en árboles.
  • Petirrojo (Erithacus rubecula): cría a finales de marzo en agujeros de tocones o a baja altura en los troncos o incluso entre raíces o matorrales bajos.
  • Zorzal común (Turdus philomelos): cría en marzo en árboles o arbustos, normalmente con el nido pegado al tronco.
  • Otras especies más tardías habitualmente en su cría, a finales de abril o comienzos de mayo, este año han adelantado la nidificación, por lo que no podrán criar en esta zona al haber desaparecido los lugares adecuados. Estas especies, todas ellas observadas en la zona, son:
  • Verderón (Carduelis chloris): cría en horquillas de arbustos.
  • Jilguero (Carduelis carduelis): cría en horquillas de arbustos.
  • Pinzón (Fringilla coelebs): cría en arbustos y horquillas de árboles.
  • Curruca capirotada (Sylvia atricaplilla): cría en ramas bajas de arbustos.
  • Lavandera blanca (Motacilla alba): cría en oquedades de árboles y tocones.
  • Herrerillo común (Parus caeruleus): cría en huecos y agujeros de árboles.

Otras muchas aves pueden verse afectadas, ya que el ecotono que constituyen las riberas debido a que son zonas de transición entre varios ecosistemas, es un medio óptimo para descansar y cazar.

Mamíferos.

Los mamíferos observados en la zona directamente o indirectamente por huellas o restos son:

Erizo común (Erinaceus europaeus): utiliza los setos vivos para su hibernación y para instalar su nido de cría. La erradicación de setos vivos es uno de los principales peligros que afectan a la población de esta especie en España.

Gato montés (Felis silvestris): ocupa bosques de galería junto a ríos, utilizándolos para sus desplazamientos.

Zorro (Vulpes vulpes): las moras constituyen parte importante de su dieta otoñal.

Ahora se verá obligado a incrementar su presión depredadora sobre especies protegidas, como anfibios o reptiles, y sobre el conejo, en detrimento del Búho real(Bubo bubo) y el Águila imperial (Aquila adalberti), frecuentes cazadores de estos lugares.

El grupo de mamíferos que utilizan el bosque de galería como corredor ecológico va a verse seriamente afectado.

Murciélagos y rodedores: destrucción de zonas de campeo y refugios.

SEGUNDA PARTE

REFLEXIONES AL INFORME JUSTIFICATIVO

DE LAS LABORES DE LIMPIEZA

EMITIDO POR LOS TÉCNICOSRESPONSABLES

A continuación se reproduce íntegro el informe remitido por Técnicos de la Comunidad de Madrid a Proyecto Verde, junto con algunas observaciones a dicho informe que consideramos de interés.

 

– – – – – – – – – – – – – – – – inicio del informe – – – – – – – – – – – – – – – –

 

INFORME SOBRE EL ESCRITO DE D. CARLOS GONZÁLEZ-AMEZÚA HEREDERO A LA ALCALDESA DE COLMENAREJO, Dª ISABEL PECES-BARBA MARTÍNEZ

 

 

El día 4 de abril de 2000, D. Carlos González-Amezúa Heredero en nombre de Proyecto Verde remite carta a la Alcaldesa de Colmenarejo en la que pone de manifiesto que en visita realizada al río Aulencia con otros compañeros, desde la presa vieja hasta la confluencia de los términos municipales de Colmenarejo con Villanueva del Pardillo y Valdemorillo, quedaron profundamente desolados ante una actuación que está destruyendo una vegetación de ribera de gran valor ecológico.

 

En el mismo escrito se manifiesta que la actuación de limpieza es enormemente dañina por una serie de puntos que se exponen.

 

Al finalizar el escrito dicen que durante la mañana del día 4 de abril intentaron hablar con alguna persona responsable en la Consejería, pero afirman que los «filtros» les impidieron hablar con alguien verdaderamente resolutivo en este tema.

 

La realidad que es la siguiente:

 

1°.     La Consejería de Medio Ambiente a través de la Dirección General del Medio Natural, Servicio de Conservación de Montes, está ejecutando desde el pasado 12 de noviembre de 1999 el proyecto de «Tratamiento de riberas en la cuenca del río Guadarrama 1ª y 2ª fase», que consiste en la limpieza y mejora del cauce y márgenes del río Guadarrama y sus afluentes, abarcando los siguientes trabajos:

 

–                     Roza de matorral con motodesbrozadora.

–                     Clareo y poda, con eliminación de los pies malformados, caídos, secos, etc. y eliminación de las ramas bajas con una altura hasta 2 m.

–                     Recogida, apilado, saca y eliminación de los residuos procedentes de la roza, desbroce, clareo y poda.

–                     Plantación de frondosas.

–                     Recogida y retirada de basura y escombros dispersa a lo largo de la ribera.

–                     Colocación de carteles de obra y señales de no hacer fuego, no verter basura y escombros, etc.

 

2°.     A primeros de abril, se han paralizado todos los trabajos con el fin de evitar daños y molestias a la avifauna de la zona.

 

3°.     Los trabajos de roza y desbroce de matorral, han consistido fundamentalmente en la eliminación parcial de la zarza común (Rubus fructicosa) abundantísima en la zona del río Aulencia, mencionada en el escrito, y cuya eliminación ha sido difícil y muy trabajosa al haber alcanzado un gran desarrollo, y haberse realizado de una forma selectiva en todos los casos en que estaba dominando, asfixiando y secando al resto de la vegetación arbórea y arbustiva. La zarza común que se cortó al no haber sido eliminada de raíz, está brotando con fuerza quedando el terreno tapizado de brotes verdes y tiernos.

 

El desbroce ha sido totalmente selectivo cuidándose en todo momento, no eliminar ninguna planta del tipo de los arces, ruscos, sauces, álamos, etc. que vegetan en buenas condiciones.

4°.     Efectivamente, el río Aulencia, cuando se iniciaron los trabajos resultaba casi inaccesible por la gran maraña de zarzas, vegetación caída en el cauce del río, troncos secos, ramas entrecruzadas y gran cantidad de basura, plásticos y restos de escombros en los lugares de fácil acceso.

 

5°.     Las aguas del río, en algunos casos medio estancadas y. desbordadas. Por el contrario ahora corren mejor y por tanto se autodepuran y oxigenan más y mejor.

 

6°.     Las aves, anfibios y reptiles de la zona, han visto mejorado su hábitat, no teniendo que comer y beber en una ribera tan degradada como hasta esta primavera.

 

7°.     La fauna piscícola, al estar las aguas más oxigenadas y mayor desarrollo de microorganismos vivirá en mejores condiciones.

 

8°.     Los arrastres de tierras no aumentan, al estar las aguas más encauzadas por haberse retirado los residuos y materiales que obstruían el cauce y los bordes sembrados de una vegetación incipiente.

 

9°.     La fructificación será más intensa, al encontrarse los árboles y arbustos rejuvenecidos, al haberse eliminado la competencia y la parte muerta de los árboles con la poda, favoreciéndose la alimentación de la fauna asociada a estos ecosistemas.

 

10º.   Los trabajos, han sido paralizados en el momento en que los mismos podían suponer algún impedimento para la nidificación y desarrollo de la avifauna de la zona, no habiéndose trabajado en el lugar donde se dice que anida el búho real presente en el término municipal de Colmenarejo.

 

11°.   La vigilancia de los Agentes Forestales de la Comarca del Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama y su entorno y la señalización ya colocada deben impedir que la zona se deteriore más de lo que estaba, por el contrario se aumentará la presencia en la ribera del río de los Agentes Forestales para que la situación mejore día a día con la colaboración de todos.

 

Por último decir que efectivamente la semana pasada, se recibió una llamada telefónica en los Servicios Técnicos de la Dirección General del Medio Natural en la que se pedía información de los trabajos que se estaban realizando en el río Aulencia. Por parte del Director de la Obra se contestó a todas las preguntas realizadas.

 

Madrid, 13 de abril de 2000

 

EL JEFE DE LA SECCIÓN II-SURESTE

Fdo.: José Luis García Martín

 

EL DIRECTOR DE OBRA

Fdo.: Rafael Mosquera Silvén

 

– – – – – – – – – – – – – – – – fin del informe – – – – – – – – – – – – – – – –

 

CONSIDERACIONES AL PUNTO 1

Los pies malformados o secos sirven de refugio y alimento a numerosas especies de insectos, aves y mamíferos, no teniendo ningún interés biológico la destrucción de estos lugares y suponiendo un gran perjuicio para este ecosistema. Asimismo, las ramas bajas de los árboles, son utilizadas por ciertas especies de aves para colgar sus nidos.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 2

La mayor parte de aves dedican los meses de febrero, marzo, abril y mayo a preparar el nido, hacer la puesta, incubar y criar a sus polluelos. Por tanto, cuando se han detenido los trabajos, el daño ya era completo e irreversible. Y no sólo la avifauna. En la zona objeto de este informe hay una gran riqueza biológica y son muchos los mamíferos, anfibios y reptiles que crían en este ecosistema por esas fechas, más aun teniendo en cuenta el invierno tan benigno que hemos tenido.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 3

El desbroce realizado no ha sido en absoluto selectivo, como lo demuestra el hecho de que la vegetación arbustiva ha sido sistemáticamente eliminada. La poda, como tal, se ha efectuado de manera poco cuidadosa, no se han “curado” las heridas y en muchos casos se ha desgarrado la rama. Esto facilitará la infección por hongos, como ya se ha podido constatar con especies como Inonotus hispidus, Coriolopsis gallica, Fomes fomentarius y Phellinus igniarius. Además, también se han talado pies de especies como sauces, álamos, olmos… e incluso especies catalogadas como el saúco (ver Anexo fotográfico). En este mismo Anexo fotográfico se puede ver el tramo de cauce que no ha sido limpiado, tramo tan rico o más en zarza como el de aguas abajo. Se puede observar la riqueza y vitalidad de su masa arbórea. La zarza ejerce un papel importantísimo en este ecosistema y es una fuente de protección y alimentación de primera magnitud, sin la cual muchas especies van a ver mermadas o en grave peligro sus poblaciones.

La zarza constituye uno de los primeros estadíos en el desarrollo de un bosque de ribera.

A su abrigo germinan y se desarrollan los los árboles y arbustos que, con el tiempo, acabarán por desplazarla. Al eliminarla se han eliminado varios años de evolución del ecosistema.

El concepto de “asfixiar” la vegetación arbórea puede estar ligado a la jardinería o a explotaciones forestales, pero nunca a un ecosistema natural, en el que cada especie ocupa el espacio “que se ha ganado”. Evidentemente, con la limpieza que se ha realizado, los árboles crecerán más. Y crecerían más todavía dejando un solo pie cada 10 metros de ribera, abonando periódicamente, fumigando y poniendo riego automático, por ejemplo.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 4

No cuesta trabajo imaginar, ahora que el acceso al río es total, cuál va a ser su estado en poco tiempo, si antes que era una “maraña” impenetrable había “basuras, plásticos y restos de escombros”, que en muchos casos siguen estando ahí. Además de poderse tirar la basura con mucha más facilidad, se puede andar en moto, cruzar con los 4×4 y cuatriciclos, pescar y coger galápagos, por poner algunos ejemplos.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 5

En el tramo que nosotros conocemos y habíamos inventariado antes de las labores de limpieza (en el término de Colmenarejo), no existía ni un solo embalsamiento que representara un problema para el río. La pendiente es suficiente como para arrastrar la vegetación que de manera natural caiga en él, y aquellos troncos que no pueden ser arrastrados se constituyen en micro-ecosistemas de enorme importancia. El verdadero problema de aguas estancadas lo constituyen los “brazos abandonados” del río. Estos brazos, que con el caudal normal no llegarían a entrar de nuevo en funcionamiento, reciben aguas cenagosas cada vez que la potabilizadora de Valmayor vierte sus lodos, lo que acompaña de un incremento momentáneo del caudal, ocupando las aguas cenagosas esos brazos abandonados, donde quedan retenidas. Esto fue observado por última vez el pasado día

2 de mayo, a las 11 horas, en que de nuevo se vertieron lodos (día festivo, para más datos).

CONSIDERACIONES AL PUNTO 6

Demuestra enorme ignorancia decir que las aves, anfibios y reptiles han visto mejorado su hábitat cuando lo que se ha hecho ha sido, simplemente, deteriorarlo o destruirlo. Anfibios y reptiles no habitan las copas de los árboles. Su vida se desarrolla a nivel del suelo, entre la vegetación que existía y ya no existe. Ahí encontraban cobijo, hacían sus madrigueras y se alimentaban. Ahora deberán aprender a cazar, a criar, a alimentarse y a cobijarse al descubierto, algo que, en el mejor de los casos, les va a llevar aprender varios millones de años. Respecto a las aves, hemos visto nidos situados en árboles con ramas podadas que han sido abandonados; también nidos caídos en el suelo.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 7

Una de las funciones de la vegetación de ribera en climas mediterráneos es proteger el cauce y sus orillas de una excesiva insolación. La luz solar directa afecta a numerosas puestas de peces, destruyendo sus huevos. La incidencia directa del sol en el cauce va a suponer un importante aumento de la temperatura del agua, lo que implica un descenso considerable en el contenido de oxígeno. Además, la fauna piscícola va a ser objeto de una pesca intensiva, ahora que se puede acceder al cauce sin problema.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 8

La vegetación sujeta y asienta el terreno. Una deforestación siempre acarrea erosión. En este caso, la poda masiva originará una erosión más efectiva sobre las orillas del cauce.

CONSIDERACIONES AL PUNTO 9

Efectivamente, dentro de pocos años, la zarza estará tan desarrollada como lo estaba hace unos meses —si no más—, y dará unas moras de excelente sabor y calidad. Entonces cabe preguntarse para qué se han gastado varias decenas de millones. Y hasta que vuelvan a crecer las zarzas, ¿qué comen los animales que se alimentan de ellas? ¿Dónde han ido a parar las especies arbóreas y arbustivas que se estaban desarrollando al abrigo del matorral?

CONSIDERACIONES AL PUNTO 10

Asusta que técnicos con tal desconocimiento sobre la vida silvestre puedan entrar con motosierras y motodesbrozadoras en un Parque Regional. Nos remitimos al punto 2, ya respondido.

TERCERA PARTE

CONSIDERACIONES JURÍDICAS Y NORMATIVAS

A tenor de todo lo expuesto en la primera parte de este informe, se deduce que la actuación llevada a cabo en la zona objeto del estudio (riberas del río Aulencia a su paso por el municipio de Colmenarejo) ha modificado sustancialmente el ecotono del bosque de ribera, alterando su equilibrio y modificando sus parámetros de uso.

Estas actuaciones se han realizado sin tener suficientemente en cuenta las leyes y disposiciones que protegen este entorno, algunas de las cuales citamos a continuación:

  1. A) Ley 20/1999 del Parque Regional de la Cuenca Media del Guadarrama .

El tramo afectado se encuentra incluido dentro del parque como Zona de Máxima

Protección, especificada en el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) como “Sotos y vegas del Guadarrama-Aulencia”.

Esta Ley establece en el Art.3a como objetivo “promover la conservación, regeneración y mejora de los ecosistemas fluviales y asociados al bosque de galería para garantizar su diversidad biológica, así como la de aquellos ecosistemas ligados a los mismos”.

El PORN establece como actuación permitida en estas zonas “la restauración de la vegetación que tenga por objeto la conservación y mejora de las formaciones existentes”.

En modo alguno autoriza la transformación de las formaciones existentes en otras diferentes.

En la Propuesta de Instrumentación Normativa, en el apartado de Prohibiciones y Limitaciones, establece: “Con carácter general se prohíbe el arranque, recogida, corta y desraizamiento de las especies incluidas en el Catálogo General de Especies Amenazadas, así como la poda de ramas y la recolección de flores, frutos y semillas de las mismas”. Se ha podido constatar la tala de varios ejemplares de Saúco (Sambucus nigra) —protegido por el Decreto de la Comunidad de Madrid 22/1985— gracias a que han rebrotado del tocón, como se demuestra en el Anexo fotográfico.

El párrafo siguiente dice: “Se prohíben las actuaciones que impliquen la destrucción o degradación de las formaciones vegetales”. A juicio de los firmantes de este informe, la eliminación de la práctica totalidad de formaciones arbustivas de la zona afectada, propiciará un cambio en el anterior ecosistema, merced al cual, aquellas especies de crecimiento más rápido y aquellas capaces de sobrevivir a la tala rasa efectuada, prosperarán en detrimento de todas las demás.

  1. B) Ley 2/1991 sobre Protección de Animales y Plantas.

En el Capítulo III, Sección 2ª, Artículo 14.1, dice: “Queda prohibido dar muerte, dañar, molestar o inquietar a las especies de animales catalogadas”. Y en el Capítulo III, Sección 2ª, Artículo 14.2: “Se prohíbe la perturbación de los espacios de recuperación, crianza, muda, invernada, reposo y paso de las especies animales catalogadas”.

Las labores de limpieza, objeto de este informe, han sido realizadas por medios mecánicos muy ruidosos (motosierra y desbrozadora), en una zona y una época del año (meses de febrero, marzo y principios de abril) en la que muchas especies catalogadas se encontraban en periodo de anidamiento o cría.

  1. C) Real Decreto 1997/1995 sobre Espacios Naturales

Artículo 1: “El Objeto del presente Real Decreto es contribuir a garantizar la biodiversidad en el territorio en que se aplica la Directiva 92/43/CEE, mediante la adopción de medidas para la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres en el territorio español”.

En el Anexo I de este Real Decreto, se establecen los “Tipos de hábitats naturales de interés comunitario”, entre los que se encuentra la “vegetación flotante de ranúnculos de los ríos de zonas premontañosas y de planicies” y “ los ríos mediterráneos de caudal permanente con cortinas vegetales ribereñas de Populus alba y Salix”,especies todas ellas muy abundantes en el ecosistema que nos ocupa.

En el Anexo II, se establecen las especies animales y vegetales para cuya conservación es necesario designar zonas especiales de conservación. En la Primera Parte del Informe se citan un buen número de especies contenidas en este Anexo.

Las actuaciones que se han llevado a cabo en las riberas del Aulencia (y en otros lugares de la Cuenca del Guadarrama) pueden ser constitutivas, no sólo de infracción administrativa, sino incluso de delito penal.

A tal efecto, el Código Penal, en su Artículo 330 establece como sujeto de una actuación delictiva a “quien, en un espacio natural protegido, dañare gravemente alguno de los elementos que hayan servido para calificarlo”. Y más adelante, en el Artículo 338, se establece el agravante de delito en zonas naturales: “Cuándo las conductas definidas en este Título afecten a algún espacio natural protegido, se impondrán las penas superiores en grado a las respectivamente previstas”.

CUARTA PARTE

CONCLUSIONES

  • Las actuaciones del tipo de las realizadas por la empresa Tragsa en el cauce del Ausencia deberían atenerse al Plan Rector de Uso y Gestión del Parque, que ya debería haber entrado en vigor. El Artículo 12 de la Ley, establece que el Plan Rector de Uso y Gestión “deberá ser informado preceptivamente por la Junta Rectora del Parque”. En el momento de redactar este informe dicha Junta Rectora aún no se ha constituido oficialmente.

Parece, cuanto menos, poco cortés —cuando no despreciativo para dicha

Junta— el hecho de emprender actuaciones tan polémicas y desafortunadas muy poco antes de constituirse esta Junta Rectora.

  • La Segunda Fase prevista —reforestación— debe ser paralizada de inmediato. Resulta incomprensible que se corten árboles y se vuelvan a plantar con cargo a los presupuestos.

¿Que criterios se han seguido para utilizar especies como Tamarix gallica y

Plátano, completamente ajenas al ecosistema que nos ocupa? El bosque tiene mecanismos suficientes para regenerarse por sí mismo, siempre que se le deje, impidiendo la circulación de vehículos por las riberas, que ahora y gracias a las actuaciones de la Comunidad de Madrid es perfectamente posible y frecuente. La pretendida reforestación, llevada a cabo mediante retroexcavadora dotada de orugas (según la Memoria de Tragsa) sería la puntilla para este ecosistema.

  • El sistema de adjudicación de la obra, mediante convenio, no parece el más adecuado tratándose de un Parque Regional y zona LIC. Se echa en falta unas directrices legales y técnicas estrictas por parte de la Administración, que se limita a revisar, corregir y aprobar la memoria presentada por la empresa adjudicataria. Habría que tener en cuenta, además, el historial de dicha empresa, de la que se podría realizar un completo informe sobre actuaciones polémicas relacionadas con el medio ambiente.
  • El bosque de ribera del río Aulencia es uno de esos ecosistemas que el espíritu y la letra de la Ley protegen. A pesar de los constantes vertidos de lodos de la potabilizadora de Valmayor y a pesar de la ausencia de depuración en Colmenarejo, la vieja presa del Aulencia decanta buena parte de estos sedimentos y permite que, aguas abajo, se haya desarrollado un ecosistema estable y privilegiado por la variedad de su flora y fauna.
  • Las actuaciones de “restauración de la ribera” no han tenido en cuenta la realidad del ecosistema (no puede ser igual una actuación en el tramo mejor conservado del río Aulencia que en un soto accesible y degradado del Guadarrama), ni las leyes que lo protegen. Se ha alterado gravemente la vida del bosque, con actuaciones que, a buen seguro, han perjudicado seriamente la reproducción de muchas especies. Se han talado pies enteros de encina, olmo, fresno, sauce… con un criterio que busca declaradamente la accesibilidad al lugar y la estética por encima de su conservación y sus valores naturales (“…se realizarán podas de formación sobre chopos y sauces…”; “…desbroce de las matas de zarza que impiden el normal tránsito por la margen…”según declara la Memoria de Tragsa). Se han talado pies de especies catalogadas. Se ha eliminado la cubierta arbustiva, privando de refugio y alimento a multitud de especies.

En definitiva: se ha sustituido un bosque natural de alto valor ecológico por un espacio antropogénico.

  • La falta de cobertura arbustiva privará de lugares de anidamiento a muchas aves, de refugio a animales tan esquivos como el erizo o el gato montés. Las crías de galápago leproso quedarán expuestas a la acción de los depredadores, como ya hemos tenido ocasión de comprobar sobre el terreno.
  • La función de “corredor biológico” que deben tener estos bosques de galería ha quedado seriamente mermada ante el desamparo que la ausencia de la vegetación arbustiva produce en las especies silvestres. El corredor del Aulencia-Guadarrama, que conecta la zona de la sierra con los sotos y bosques de la planicie, y permitía el intercambio genético y la expansión, ha sido “limpiado en su mayor parte”. Las consecuencias de aislar estos ecosistemas pueden ser de enorme gravedad. Esta función —que en parte ha inspirado la creación del Parque Regional— ha sido muy afectada por una actuación que no ha tenido en cuenta otros factores que los puramente forestales y recreativos. A este respecto, el propio PORN dice: “La presencia de agua y de arbustos espinosos en los diferentes cauces favorece el flujo de fauna procedente de biotopos circundantes hacia dichos cauces, por lo que muchas especies de vertebrados propias de estos habitats desarrollan parte de sus ciclos vitales en la vegetación riparia.

(Memoria descriptiva: Medio Natural: Fauna.)”

  • La sistemática eliminación de la zarza priva al bosque de un almacén de comida inigualable.

Muchos animales podían hacer frente al crudo invierno con buenas perspectivas de supervivencia gracias a esta despensa de moras, sabrosas y nutritivas.

  • El río, antes inaccesible para el hombre en la inmensa mayoría de su recorrido, es ahora un lugar de fácil acceso, al haber desaparecido la vegetación arbustiva. Las motos y todoterrenos, que tanto daño están haciendo en los alrededores, podrán campar a sus anchas. De hecho ya se les ve cruzando el río y recorriendo sus —ahora— expeditas orillas, cosa inimaginable hace tan solo unos meses.
  • Los trabajos de tala se han realizado en una época del año en la que es muy difícil incluso para técnicos —y no digamos para el personal no cualificado— diferenciar especies arbóreas de pocas savias carentes de follaje. Y cómo era de esperar, se han cortado muchas cosas que no deberían haberse cortado.
  • Hemos sido capaces —y así lo hemos reflejado en este informe— de evaluar los daños inmediatos producidos sobre la flora y la fauna. Pero se tardará tiempo en saber el alcance a medio y largo plazo que esta actuación vaya a tener sobre el complejo ecosistema de la zona.
  • La Ley no obliga a realizar una evaluación de impacto ambiental para obras de esta índole. Pero las obras ejecutadas por Tragsa han conculcado varias leyes de protección de la naturaleza emanadas de la propia Asamblea de Madrid, lo que resulta paradójico y exige una pronta revisión de las normas que regulan la EIA.
  • La memoria elaborada por Tragsa para esta obra no hace la menor alusión al valor del ecosistema en el que se ha actuado, ni a las precauciones que deben adoptarse para preservar la fauna, ni a las especies protegidas que no se deben tocar, ni al carácter de Parque Regional de la zona tratada. Todo esto parece no tener el más mínimo interés.
  • Se ha dañado gravemente un ecosistema protegido, y se ha hecho con dinero público.

QUINTA PARTE

BUSCAR SOLUCIONES

Somos conscientes de la dificultad que representa para una gran administración como la autonómica, con unos medios limitados, controlar todas y cada una de las actuaciones de las empresas adjudicatarias e incluso de sus propios funcionarios. Y precisamente por eso, se debería contar de manera más efectiva con aquellas entidades y asociaciones ocupadas y preocupadas por estos temas , máxime cuando de esta colaboración sólo se pueden derivar beneficios para todas las partes, especialmente para nuestro medio ambiente.

La frecuencia de episodios similares a éste y la convicción mostrada por los técnicos responsables de la obra en el informe remitido (ver Anexo I), nos llevan a considerar que quizá haya llegado el momento de sentarnos todos juntos —Administración, Legisladores y Asociaciones Ecologistas— a dialogar sobre un nuevo modelo de gestión ecológica, que tenga en cuenta toda la complejidad de los ecosistemas y no sólo los aspectos forestales y recreativos —muy importantes, pero no los únicos— que parecen ser los que priman en la actualidad.

Quizá tengamos que recordar que en un entorno natural equilibrado —y el bosque de galería del Aulencia era lo más parecido— todos los elementos de la flora y la fauna cumplen un cometido. No se puede tocar una pieza sin que el “puzzle” se resienta. Incluso esos árboles viejos y malformados que tanto parecen molestar a los técnicos que han dirigido las obras, tienen una función vital en el bosque.

La Directiva Marco sobre Aguas, cuya aprobación por Bruselas parece inminente, introduce el concepto de Calidad Ecológica como baremo para determinar la calificación de un humedal, en contra de los criterios hasta ahora imperantes que daban al análisis físico-químico del agua prioridad casi absoluta. Este concepto de Calidad Ecológica engloba, además de las características químicas, las morfológicas y las biológicas. Este concepto global deberá, por tanto, incorporarse en breve a todos los criterios de calidad de las aguas.

El medio ambiente es un bien frágil. Y necesita tratarse con la delicadeza, la prudencia y el conocimiento que esta fragilidad exigen. La propuesta de colaboración entre administración y administrados, debería permitir que los siempre escasos recursos económicos destinados al medio ambiente sirvan para protegerlo y no, como en este caso, para destruirlo. La comunicación con las corporaciones locales, asociaciones y grupos ecologistas locales y regionales mediante la apertura de un periodo de alegaciones similar al que existe para otras obras, detectaría los problemas antes de que se produjeran, evitando conflictos que siempre acaban teniendo una repercusión social y mediática que nadie desea.

Los ecosistemas tienden a equilibrarse por sí mismos. La intervención humana, llevada a cabo de la manera que se ha hecho, sólo dificulta el proceso e incluso lo invierte.

De los problemas que pudiera tener el ecosistema objeto de este estudio, ninguno de la magnitud que deja tras de sí la actuación de Tragsa bajo la dirección de la Dirección General de Medio Natural. ¿Qué interés tiene para el río Aulencia y su fauna la accesibilidad humana? Se aduce que se ha evitado el riesgo de incendio merced a la eliminación del matorral. Pero es ahora cuando existe verdadero riesgo, ya que es ahora cuando se puede visitar una zona que anteriormente era inaccesible. La estética forestal no es la estética del martín pescador, el galápago o el saúco. Los espacios se pueden reforestar, pero lo que es irreversible es la pérdida de la biodiversidad en su conjunto.

El gran azote de nuestros bosques de ribera no son las zarzas, ni los árboles malformados ni secos, ni el matorral (por la abundancia de todas estas formaciones vegetales se llaman, precisamente, “bosques de galería”). Todos sabemos cuáles son los verdaderos enemigos de estos ecosistemas y, en el caso concreto del río Aulencia, uno de los peores son los vertidos ilegales de lodos que la potabilizadora del embalse de Valmayor viene realizando desde hace muchísimos años.

 

 

 

EL EQUIPO REDACTOR:

 

Carlos González-Amezúa Heredero

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS ENACCIÓN

 

Alberto Fernández Lop

DR. EN BIOLOGÍA.

ADENA-WWF ESPAÑA

 

Javier Zarzuela

MIEMBRO DE LA JUNTA RECTORA DELPRCMG

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Theo Oberhuber

BIÓLOGO

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Francisco Segura Castro

BIÓLOGO

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Elvira González Sánchez

DRA. EN BIOLOGÍA.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS ENACCIÓN

 

Gema Morales Mazón

DRA. EN BIOLOGÍA

 

Roberto Pérez Moro

BIÓLOGO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS ENACCIÓN

 

Serafín Díaz Sánchez

BIÓLOGO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS ENACCIÓN

 

Luis Javier Bernárdez

NATURALISTA.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS ENACCIÓN

 

Enrique Cortés Estrada

BIÓLOGO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Javier Herrero Mendoza

INGENIERO AGRÓNOMO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Elena García Motellón

BIÓLOGA.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

José Manuel Chaves

BIÓLOGO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Margarita Fernández Arroyo

FARMACEUTICA

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Ricardo Fombuena Licer

INGENIERO AGRÓNOMO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Carmen Navarro

BOTÁNICO. ARBA

 

Francisco Prieto García

MICÓLOGO.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Andrés Revilla

BOTÁNICO. ARBA

 

Susana Martín Arribas

BIÓLOGA.

PROYECTO VERDE-ECOLOGISTAS EN ACCIÓN

 

Mª del Carmen Guillén Benito

BIÓLOGA

 

Arturo Almodóvar Manzanares

BIÓLOGO

 

 

 

 

 

(Para descargar documento Acrobat (PDF) pulse aquí)

Proyecto para el establecimiento de una estación biológica en Valmenor

Haz click aquí para ampliarEn el embalse de Valmenor, que en Colmenarejo conocemos como “La presa vieja” y en Valdemorillo como el “embalse de Valdemorillo”, existen unas edificaciones que forman parte de las viejas instalaciones creadas a principios de siglo para decantar y depurar de sólidos las aguas de este embalse y proporcionar infraestructura y cobijo a los empleados que trabajaban en las mismas. En el lado de Valdemorillo está, en un lugar privilegiado y con unas impresionantes vistas al embalse, la casa del ingeniero jefe. Y en el lado de Colmenarejo, tenemos, además de toda la infraestructura industrial, unas casitas que debieron ser morada del personal de mantenimiento y que llevan, como todo lo demás, años abandonado. El estado de estas casitas es bueno, lo que permite que, con poca inversión, puedan ser de nuevo utilizables.

Estas instalaciones pertenecen al propietario del embalse, el Estado español, a través de su organismo autónomo, la Confederación Hidrográfica del Tajo, y están en una zona de máxima protección del Parque Regional del Guadarrama.

Esta ubicación tan sensible, unida al hecho de que toda esta zona es refugio de la más importante fauna que tenemos en todo el municipio, desaconseja por completo cualquier utilización que no sea estrictamente científica y minoritaria, ya que los impactos que pueden producir un alto número de visitantes, serían suficientes para alejar de estos lugares al búho real, al gato montés, a la gineta y quién sabe qué otros huéspedes ilustres.

Pensamos que sería un excelente uso la creación de una estación biológica permanente, que pudiera ser utilizada por todos aquellos colectivos científicos con interés en el estudio de la fauna, la flora o la gea de la zona. Excepcionalmente, podrían impartirse seminarios prácticos e incluso visitas muy selectivas de escolares. El centro, que podemos llamar “Estación biológica de Valmenor” tendría conexiones firmes con tres pilares básicos: el mundo universitario, la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Medio Ambiente.

Haz click aquí para ampliarEl proyecto fue presentado a la Consejería de Medio Ambiente, que lo valoró muy positivamente, pero fue aplazado por falta de presupuesto. De momento está a la espera, bien de que la Consejería lo retome, o bien de que cambien las condiciones políticas y pueda ser el propio ayuntamiento de Colmenarejo quién lo auspicie frente a la Administración.
Lo más interesante de este proyecto no es el proyecto en sí, sino las posibilidades de futuro que tiene. Dentro de unos años, las aguas que lleguen a este embalse de Valmenor, serán procedentes de la depuradora de Colmenarejo (en construcción), y en menor medida de la planta potabilizadora del embalse de Valmayor. Para entonces, es de esperar que hayamos conseguido evitar el vertido de lodos que periódicamente vierte ilegalmente esta planta al río Aulencia y que se terminan depositando en este pantano.

Bien por una limpieza previa del embalse o bien por la desactivación de estos residuos con el paso del tiempo, si nada se tuerce, en unos años este embalse volverá a ser uno de los lugares privilegiados para la fauna de toda la Comunidad de Madrid, y este proyecto (u otro similar) estará sobre las mesas de todos los responsables —comunitarios, estatales y autonómicos— de medio ambiente.

Ayudando al galápago español (Actividad científica)

No se trata de una actividad inducida por la reciente ola gubernamental de patriotismo. En absoluto.

fortunadamente para ellos, los animales no están ligados a los países, ni tienen que sufrir las servidumbres derivadas de ello. Los animales son de aquellos lugares que han permitido, a lo largo de los siglos, milenios y millones de años, que lleguen a ser lo que son. Mientras que los seres humanos nos empeñamos en tratar de convencer a nuestros vecinos de que la tierra que habitamos tiene entidad propia porque la habitamos nosotros, y no otros, los animales son lo que son porque habitan una determinada región o territorio. No es el ser vivo quien da carta de naturaleza al territorio, sino justamente al revés.

¿Quiénes son estos galápagos?
El entorno mediterráneo-europeo ha creado dos especies de galápago a lo largo de millones de años, que se han ido adaptando perfectamente al devenir de las circunstancias propias de este territorio. Son el galápago leproso (Mauremys caspica) y el galápago europeo (Emys orbicularis). Son las únicas especies de galápago que podemos encontrar en España.

El primero, el leproso, es una especie con buena salud, a pesar de su nombre. Es relativamente abundante en los arroyos y ríos de nuestra geografía. En Colmenarejo es abundante, y se le puede ver tomando el sol en los días fríos de comienzo de la primavera, en las riberas del Aulencia, La Peralera, Membrillo… y otros lugares. Se llama vulgarmente “leproso” por el aspecto de su concha, algo descamada y cutre. Si a este nombre unimos que, en nuestro pueblo, habita arroyos verdaderamente infectos, puede dar una sensación equivocada sobre su salud ecológica.

El galápago europeo es otra cosa. Ocupa hábitats algo más exigentes que los del leproso, pero con mucha menor fortuna. De hecho, el galápago europeo está en peligro de extinción.

Una vez más (y son muchas ya) en Colmenarejo tenemos la fortuna de poder verle en el río Aulencia. No es nada fácil, porque es muy escaso. Originariamente, estos dos galápagos seguramente ocuparían ecosistemas diferentes, pero la eliminación y degradación progresiva de sus lugares de habitación, ha provocado que en la actualidad compartan ciertos hábitats. Es una adaptación natural a las condiciones cambiantes del medio, y no tendría mayor trascendencia si no hubiera entrado en juego una especie temible y agresiva, capaz de modificar las condiciones del medio como nunca sucedió anteriormente en la historia de la Tierra: el Homo sapiens.

Vuelve el hombre
Las crías de Homo sapiens han mostrado desde tiempos de Atapuerca (si no antes) una gran predilección por las mascotas. Y los ejemplares adultos de esta especie, se caracterizan por dar a sus crías, no solo lo que necesitan para su adecuado desarollo físico, social e intelectual, sino también todo aquello que las crías demandan, aunque sea absolutamente superfluo. Y las crías, con esa inteligencia prodigiosa que no tiene parangón en el reino animal, saben aprovechar esta debilidad del adulto, y demandan constantemente.

Para complacer esta demanda, el Homo sapiens de Estados Unidos, se dedicó a criar a sus propios galápagos autóctonos y venderlos en Europa. Aquí, los adultos de Homo los compraron a mansalva para contentar a sus crías. Y cuando se quisieron dar cuenta, uno de cada 20 hogares con niños tenía su galápago de Florida.

Pasó el tiempo, y lo que era una preciosa y manejable tortuguita, se convirtió en un terrible depredador de 30 cm. Esta evolución tuvo lugar al mismo tiempo que la de la cría de Homo, que pasó de ser un cachorro adorable a convertirse en un individuo preadulto atacado de abcesos purulentos (llamados granos) y dominado por la secreción hormonal, y con un carácter insufrible. Ante esta situación, la manada de Homos comienza a ver a la enorme tortuga como un verdadero problema. Y, ¿cuál es la manera en que la especie Homo encara sus problemas? Desviándolos. Y así, el galápago de Florida termina en un río, arroyo o pantano cercano, porque —eso sí— la especie Homo cuida mucho las apariencias, y no es cuestión de “cargarse” a la tortuguita.

Todo lleno de galápagos de Florida
Y así, poco a poco, nuestros ríos, pantanos y arroyos se han ido llenando de este galápago, que no es ni bueno ni malo, pero que compite por la comida y el territorio con los galápagos europeos, y lo hace con gran ventaja, porque es muchísimo más agresivo y voraz.
Las autoridades, que muestran gran sensibilidad por los problemas ambientales, prohíben en un momento dado, la importación de este galápago. Pero no pasa nada, porque en el sureste de los Estados Unidos existe la mayor diversidad de galápagos del mundo, y si no les dejan mandarnos el de Florida, pues mandarán el del Mississippi, como ocurre actualmente. Y cuando prohíban el del Mississippi, pues mandarán otro cualquiera de entre las cuarenta especies que tienen.

Un desastre ecológico
Estos galápagos americanos están terminando, no solo con las colonias de galápago europeo, sino también con grandes poblaciones de anfibios y de peces autóctonos. Son carnívoros puros, se comen las puestas, las crías, los renacuajos, los alevines, los individuos adultos… todo lo que cae en sus manos. Incluso, todo aquel que tenga un galápago foráneo, sabe que a pesar de no tener dientes, es capaz de hacer presa en un dedo y no soltarlo.

La AHE entra en escena
La AHE es la Asociación Herpetológica Española (), una asociación eminentemente científica cuyo objetivo primordial es el estudio y protección de la fauna herpetológica de nuestro país. Los “herpetos” son los anfibios y los reptiles: ranas, sapos, tritones, culebras, serpientes, tortugas y galápagos.

La AHE se dirige a nosotros en septiembre de 2002. Ya habíamos tenido ocasión de colaborar directa o indirectamente en varios temas: estudio de la fauna de anfibios en Colmenarejo, censo de poblaciones atropelladas de sapo en el entorno del dique de Valmayor, estudio de la fauna de anfibios en el Parque del Guadarrama, etc. En esta ocasión, el objetivo es intentar capturar galápago americano en una zona que se ha detectado como uno de los últimos reductos del galápago europeo en nuestra región: el área de influencia de los ríos Aulencia-Guadarrama. La convocatoria tiene un objetivo quizá más importante: la realización de un reportaje por parte de Telemadrid, con el objeto de concienciar a la población para que no deje en libertad este tipo de tortugas importadas.
Ponemos en marcha la maquinaria, y una vez más, nuestros socios responden a las mil maravillas. Cerca de 40 personas nos dirigimos al embalse de los Arroyos, lugar en el que la AHE ha detectado una importante presencia de galápago de Florida.

El resto de la historia la podéis ver en el reportaje fotográfico “Pescando” galápagos. Merece especial atención el enorme galápago de más de 25 años que consiguieron atrapar José Ignacio y Juan. Un precioso ejemplar que, por desgracia, estaba en un lugar al que nunca debía haber llegado. Tanto este ejemplar, como todos los que nos han ido llegando a raíz de la emisión del reportaje en Telemadrid y del artículo aparecido en el Diario del Noroeste, han sido llevados a Grefa, en donde disfrutan de una vida apacible en una charca artificial que comparten con decenas de colegas llegados del otro lado del Atlántico.

Conclusión: ¿No es muchísimo más fácil no comprar galápagos, o al menos no tirarlos a los ríos?

Respuesta: sí.

Informe sobre el escrito de Carlos González-Amezúa a la alcaldesa acerca del desbroce del Aulencia

INFORME SOBRE EL ESCRITO DE D. CARLOS GONZÁLEZ-AMEZÚA HEREDERO A LA ALCALDESA DE COLMENAREJO, Dª ISABEL PECES-BARBA MARTÍNEZ

El día 4 de abril de 2000, D. Carlos González-Amezúa Heredero en nombre de Proyecto Verde remite carta a la Alcaldesa de Colmenarejo en la que pone de manifiesto que en visita realizada al río Aulencia con otros compañeros, desde la presa vieja hasta la confluencia de los términos municipales de Colmenarejo con Villanueva del Pardillo y Valdemorillo, quedaron profundamente desolados ante una actuación que está destruyendo una vegetación de ribera de gran valor ecológico.

En el mismo escrito se manifiesta que la actuación de limpieza es enormemente dañina por una serie de puntos que se exponen.

Al finalizar el escrito dicen que durante la mañana del día 4 de abril intentaron hablar con alguna persona responsable en la Consejería, pero afirman que los «filtros» les impidieron hablar con alguien verdaderamente resolutivo en este tema.

La realidad que es la siguiente:

1°.     La Consejería de Medio Ambiente a través de la Dirección General del Medio Natural, Servicio de Conservación de Montes, está ejecutando desde el pasado 12 de noviembre de 1999 el proyecto de «Tratamiento de riberas en la cuenca del río Guadarrama 1ª y 2ª fase», que consiste en la limpieza y mejora del cauce y márgenes del río Guadarrama y sus afluentes, abarcando los siguientes trabajos:

–                     Roza de matorral con motodesbrozadora.

–                     Clareo y poda, con eliminación de los pies malformados, caídos, secos, etc. y eliminación de las ramas bajas con una altura hasta 2 m.

–                     Recogida, apilado, saca y eliminación de los residuos procedentes de la roza, desbroce, clareo y poda.

–                     Plantación de frondosas.

–                     Recogida y retirada de basura y escombros dispersa a lo largo de la ribera.

–                     Colocación de carteles de obra y señales de no hacer fuego, no verter basura y escombros, etc.

2°.     A primeros de abril, se han paralizado todos los trabajos con el fin de evitar daños y molestias a la avifauna de la zona.

3°.     Los trabajos de roza y desbroce de matorral, han consistido fundamentalmente en la eliminación parcial de la zarza común (Rubus fructicosa) abundantísima en la zona del río Aulencia, mencionada en el escrito, y cuya eliminación ha sido difícil y muy trabajosa al haber alcanzado un gran desarrollo, y haberse realizado de una forma selectiva en todos los casos en que estaba dominando, asfixiando y secando al resto de la vegetación arbórea y arbustiva. La zarza común que se cortó al no haber sido eliminada de raíz, está brotando con fuerza quedando el terreno tapizado de brotes verdes y tiernos.

El desbroce ha sido totalmente selectivo cuidándose en todo momento, no eliminar ninguna planta del tipo de los arces, ruscos, sauces, álamos, etc. que vegetan en buenas condiciones.

4°.     Efectivamente, el río Aulencia, cuando se iniciaron los trabajos resultaba casi inaccesible por la gran maraña de zarzas, vegetación caída en el cauce del río, troncos secos, ramas entrecruzadas y gran cantidad de basura, plásticos y restos de escombros en los lugares de fácil acceso.

5°.     Las aguas del río, en algunos casos medio estancadas y. desbordadas. Por el contrario ahora corren mejor y por tanto se autodepuran y oxigenan más y mejor.

6°.     Las aves, anfibios y reptiles de la zona, han visto mejorado su hábitat, no teniendo que comer y beber en una ribera tan degradada como hasta esta primavera.

7°.     La fauna piscícola, al estar las aguas más oxigenadas y mayor desarrollo de microorganismos vivirá en mejores condiciones.

8°.     Los arrastres de tierras no aumentan, al estar las aguas más encauzadas por haberse retirado los residuos y materiales que obstruían el cauce y los bordes sembrados de una vegetación incipiente.

9°.     La fructificación será más intensa, al encontrarse los árboles y arbustos rejuvenecidos, al haberse eliminado la competencia y la parte muerta de los árboles con la poda, favoreciéndose la alimentación de la fauna asociada a estos ecosistemas.

100.   Los trabajos, han sido paralizados en el momento en que los mismos podían suponer algún impedimento para la nidificación y desarrollo de la avifauna de la zona, no habiéndose trabajado en el lugar donde se dice que anida el búho real presente en el término municipal de Colmenarejo.

11°.   La vigilancia de los Agentes Forestales de la Comarca del Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama y su entorno y la señalización ya colocada deben impedir que la zona se deteriore más de lo que estaba, por el contrario se aumentará la presencia en la ribera del río de los Agentes Forestales para que la situación mejore día a día con la colaboración de todos.

Por último decir que efectivamente la semana pasada, se recibió una llamada telefónica en los Servicios Técnicos de la Dirección General del Medio Natural en la que se pedía información de los trabajos que se estaban realizando en el río Aulencia. Por parte del Director de la Obra se contestó a todas las preguntas realizadas.

Madrid, 13 de abril de 2000

EL JEFE DE LA SECCIÓN II-SURESTE

Fdo.: José Luis García Martín

EL DIRECTOR DE OBRA

Fdo.: Rafael Mosquera Silvén

Reunión con el Director General del Medio Natural para tratar la polémica limpieza de las riberas del Aulencia

Finalmente, el trabajo desarrollado a lo largo de los últimos cuatro meses para conseguir un cambio de postura por parte de la Administración en su política de limpieza de las riberas del Guadarrama y el Aulencia, ha cristalizado en unos compromisos muy positivos por parte de Juan del Álamo, Director General del Medio Natural de la Comunidad de Madrid.

La mayor parte de socios de Proyecto Verde y la inmensa mayoría de ciudadanos de Colmenarejo desconocen las graves actuaciones que la empresa Tragsa, por encargo de la Consejería de Medio Ambiente, ha llevado a cabo en las riberas del Aulencia. Pero si de desastrosos podemos calificar los trabajos desarrollados durante la pasada primavera, son aún peores los que estaban previstos, y que, finalmente, hemos podido paralizar con la ayuda de otros colectivos ecologistas.
No hemos querido, en primera instancia, utilizar la presión mediática en este tema, con la esperanza de lograr mejores resultados mediante una táctica más conciliadora, como afortunadamente así ha sucedido. Creemos que merece la pena relatar telegráficamente una historia que muy pocos conocemos.
Finales de marzo. Miembros de Proyecto Verde, que están trabajando en el Inventario Medioambiental de Colmenarejo, detectan la presencia de varias cuadrillas realizando talas y desbroces en las riberas del Aulencia, en el extremo sur del término municipal, en una zona de máxima protección del Parque Regional del Curso Medio del Guadarrama. Alarmados por la magnitud y características de los trabajos, lo ponen en nuestro conocimiento. Acompañados por expertos de la asociación, hacemos un primer recorrido por la zona, comprobando la gravedad de la intervención. Donde antes existía una espesa y rica vegetación, que protegía el cauce del río, permitiendo la pervivencia de una gran variedad de flora y fauna, ahora ha quedado un cauce deforestado, donde sólo se han respetado los árboles de mayor porte y crecimiento rectilíneo, eliminando todo el matorral, incluyendo especies protegidas y podando ramas de diámetros muy superiores a los permitidos. En esta primera aproximación, los hechos son calificados de “atentado medioambiental”.
Ventinueve de marzo. Se pide la colaboración de ARBA —Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono— para que haga una evaluación de la flora y emita un informe sobre la actuación de Medio Ambiente.
Cinco de abril. ARBA nos hace llegar su informe. Resulta extraordinariamente crítico con los trabajos de poda y desbroce en todos sus aspectos. Adjunta, asimismo, un completo inventario de la flora presente en la zona; Noventa especies de plantas, algunas muy escasas en la provincia y no citadas con anterioridad en la zona, como el Rusco (Ruscus aculeatus). Este informe constata la variedad y riqueza en flora del lugar, al tiempo que detecta la tala de pies enteros de Saúco (Sambucus nigra), especie catalogada como de especial interés, y protegida por las legislaciones autonómica, estatal y europea.
Siete de abril. Se remite un primer informe a la Dirección General del Medio Natural, a través del Ayuntamiento de Colmenarejo, en el que se solicita la inmediata paralización de los trabajos, al tiempo que se muestra nuestra desolación por el grave daño producido al ecosistema.
Segunda semana de abril. Se interrumpen los trabajos de poda y desbroce.
Once de abril. Se recibe del Museo Nacional de Ciencias Naturales una identificacion de mejillón de río hallado en la zona: Unio pictorum, que no estaba citado aguas abajo de Valmayor. Se constata el grave daño producido a las aves nidificantes y a la colonia de galápago leproso, por citar un par de ejemplos.
Diecisiete de abril. Recibimos, a través del Ayuntamiento, un informe firmado por José Luis García Martín y Rafael Mosquera Silvés, Jefe de la Sección II y Director de la Obra, respectivamente, en el que se justifican los trabajos realizados. La absoluta carencia de rigor científico y las disparatadas aseveraciones de este informe, ponen de manifiesto lo errático en las directrices utilizadas para este proyecto, presupuestado en varias decenas de millones de pesetas de dinero público.
Finales de abril. Se toma la decisión de llevar este asunto hasta sus últimas consecuencias, dada la gravedad de los hechos. Para ello se convoca a un “Comité de Expertos” de Proyecto Verde, integrado fundamentalmente por biólogos, y naturalistas, al que se invita a Javier Zarzuela, de Ecologistas en Acción de Galapagar y representante por los ecologistas en la Junta Rectora del Parque del Guadarrama; Arturo Almodovar, biólogo auditor ambiental; Gema Morales, bióloga experta en anfibios y reptiles; Julián García Valverde, economista con una dilatada experiencia en la Administración, y Mª del Carmen Guillén, bióloga. Este comité, formado por 20 personas, ultima durante más de un mes, un detallado informe, que queda listo a primeros de junio, después de varias reuniones y visitas a la zona afectada.
Primeros de mayo. Se debate la estrategia a seguir. Puesto que el daño ya está hecho y se han logrado paralizar momentáneamente las actuaciones, prevalece el criterio de dialogar con la Administración frente al de denunciar ante el Fiscal de Medio Ambiente y los medios de comunicación. No obstante, para “allanar” el camino, publicamos alguna nota en la prensa local sobre el asunto, eludiendo otros medios de mayor trascendencia, también interesados en el tema.
Cuatro de mayo. Recibimos una llamada del ingeniero responsable de la poda del Aulencia, en un tono sumamente conciliador, ofreciéndose a explicarnos los trabajos realizados. La respuesta es que “los trabajos se explican por sí mismos”.
Seis de mayo. Asamblea de la federación de Madrid de Ecologistas en Acción. Proyecto Verde informa del tema, encontrando un apoyo absoluto. Se acuerda utilizar la experiencia en Colmenarejo y el trabajo realizado por Proyecto Verde para extrapolarlo a toda la Comunidad de Madrid y así tratar de conseguir un compromiso global por parte de la Administración en el delicado tema de tratamiento de riberas.
Siete de mayo. Alberto Fernández Lop, Dr. en biología y responsable del área de medio natural de WWF•Adena, se pone en contacto con Proyecto Verde para visitar la zona afectada. Queda doblemente impresionado: de un lado, por la calidad del bosque de ribera que aún queda intacto; del otro, por la tropelía llevada a cabo en la zona “limpiada”. Se ofrece a colaborar con nosotros en todo lo que sea necesario.
Mes de mayo. A lo largo del mes, se establecen varios contactos con los ingenieros responsables y se consultan documentos en la propia Consejería (se ponen todas las trabas posibles, denegándonos el acceso a documentos y prohibiéndonos hacer fotocopias, lo que nos obliga, incluso, a copiar a mano varias páginas de la Memoria Técnica). De la documentación consultada, se desprenden una serie de circunstancias poco “habituales” en los procedimientos de contratación. No existe Pliego de Condiciones para sacar a concurso la obra del Aulencia. Ésta se ha adjudicado directamente a Tragsa, empresa participada por el Estado, tristemente famosa en círculos ecologistas por sus frecuentes “deslices” medioambientales. También descubrimos que el documento técnico sobre cuáles debían ser los trabajos a realizar ha sido elaborado por Tragsatec, filial de Tragsa, sin que hayan intervenido los técnicos de la Consejería. Es decir, que es una empresa quien decide qué es lo que se hace en un Parque Regional, cómo se hace y quién lo hace, con el beneplácito de la Administración y a espaldas de los Ayuntamientos implicados y de la Junta Rectora del Parque. Así —como no podía ser de otra manera— se suceden en dicha memoria los desatinos, algunos tan disparatados como el de repoblar las riberas —previamente deforestadas— con especies que jamás han estado presentes en nuestro río, como plátano, almez o tamarix.
Primeros de junio. Se establece contacto con algunos de los mayores expertos en el campo de los sotos, ligados muchos de ellos a la Universidad: Agustina Sterling, Francisco Lara, Marta González del Tánago y Eugenio Rico. Se les remite el informe elaborado por Proyecto Verde, para someterlo a su consideración e incorporar sus observaciones. La opinión es muy favorable y la felicitación, unánime. Algunos, incluso, se ofrecen a suscribirlo. No obstante, se acuerda con ellos, “dejarles en la recámara” para, en caso de que la Administración no acepte nuestros postulados, solicitar su mediación, como personas de prestigio reconocido y desligadas tanto de la Administración como del movimiento ecologista.
Primera semana de junio. Cambios en la consejería de Medio Ambiente. El nuevo Consejero convoca la Junta Rectora del Parque Regional. Los representantes ecologistas dan una primera pincelada sobre el asunto “Aulencia-Guadarrama”.
Mediados de junio. Reunión de la cúpula de Ecologistas en Acción con el nuevo Consejero de Medio Ambiente. Se le informa de la reunión que se ha solicitado con el Director General, Juan del Álamo, para tratar el tema del Aulencia-Guadarrama y se le hace un pequeño anticipo de lo que se avecina.
Dieciseis de junio. Ya hay fecha para la reunión con el Director General del Medio Natural: 29 de junio.
Última semana de junio. Se dan los últimos retoques al informe y se perfila la estrategia. Existen rumores de que Tragsa ha preparado un contrainforme.
Ventinueve de junio. Reunión con el Director General. Asisten, además del propio Juan del Álamo y de José Luis García, responsable de la obra, Paco Segura, biólogo y coordinador de la Federación de Madrid de Ecologistas en Acción, Alberto Fernández Lop, Javier Zarzuela y el presidente de Proyecto Verde. A lo largo de hora y media, y una vez contrarrestado un intento de justificación por parte de José Luis García de los trabajos realizados, la reunión entra en un cauce muy receptivo por parte del Director General. La Administración reconoce tácitamente sus carencias en cuanto al bagaje científico a la hora de valorar y diseñar actuaciones de este tipo. Pronto se alcanzan algunos compromisos. Los más destacables son:
• Suspender la proyectada reforestación con ahoyadoras montadas sobre retroescavadora y cualquier otra intervención en el Aulencia.
• Compromiso de informar y someter a consideración previa de los grupos ecologistas implicados cualquier intervención en los sotos de ribera del Guadarrama y el Aulencia.
• Elevar una consulta a expertos sobre la función de las zarzas en los ecosistemas de ribera (asunto polémico y muy debatido).
• Realizar unas Jornadas en Colmenarejo sobre bosques de ribera, en las que participen la Administración, la comunidad científica y los ecologistas.

Conclusión
Proyecto Verde considera que ha merecido la pena el esfuerzo de estos meses. Si tras la desafortunada actuación de Medio Ambiente en las riberas del Aulencia, se logra —como así esperamos— un compromiso para adecuar sus actuaciones en el tratamiento de riberas al dictado de la comunidad científica, daremos por buenos los dos kilómetros de soto destruidos, porque serán los últimos que se destruyan en la Comunidad de Madrid. Así lo esperamos y deseamos, y en esa línea seguiremos trabajando.
Por otra parte, la disposición del Director General, que los asistentes a la reunión calificamos casi unánimemente de muy buena, permite albergar fundadas esperanzas de disponer de un valioso interlocutor, abierto al diálogo y al consenso en otros temas de enorme importancia, como el Plan de Ríos, previsto para los próximos cinco años, y al que se va a destinar una partida de diez mil millones de pesetas.
La celebración de unas jornadas en Colmenarejo sobre los Bosques de Ribera, va a permitir reunir en una mesa a los máximos especialistas en esta materia, a la Administración y a los ecologistas. El objetivo es lograr unas conclusiones consensuadas que vinculen a la Administración, al tiempo que se recopila en una edición todas las ponencias presentadas. El objetivo es ambicioso, pero alcanzable.
Para finalizar este extenso artículo, Proyecto Verde quiere mostrar su agradecimiento a cuantos han trabajado durante estos meses para evitar que cosas como ésta vuelvan a suceder. A todos ellos les cabe la satisfacción y el orgullo de un trabajo útil y bien hecho, cuyos objetivos se han logrado plenamente.
Aquel que desee una copia del Informe elaborado por nuestra asociación sólo tiene que pedirlo a Proyecto Verde.

Maratones: ¿Qué?, ¿cuándo?, ¿cómo?

¿Qué son los maratones?

Los maratones de Proyecto Verde no son carreras pedestres, sino jornadas dedicadas de manera intensiva a la identificación de flora o fauna.

Hasta ahora hemos realizado 3 maratones ornitológicos y 2 maratones botánicos. Gracias a ellos (en especial a los maratones ornitológicos) ha sido posible obtener datos interesantes sobre especies y su distribución geográfica.

Pero lo más interesantes de los maratones no es su vertiente científica, sino el aspecto educativo y lúdico. Los grupos que participan en los maratones suelen ser familias y grupos de amigos, que en cierta medida “se obligan” a recorrer el término municipal, prestando una atención especial a la presencia de aves o especies vegetales, tratando de clasificarlas, ojeando guías, escrutando el cielo con sus prismáticos, en una actividad que, aunque tiene también un cierto carácter competitivo, es sumamente relajante y gratificadora.

¿Cuándo se celebran?

En primavera. Es un momento en que muchas aves que vienen solo a pasar el invierno aún no se han marchado (las invernantes), por lo que coinciden en nuestras tierras con las aves que siempre están con nosotros (las nidificantes). Así, es posible localizar un número importante de especies, aunque algo alejado del número máximo de especies que es posible ver en nuestro municipio a lo largo del año, que supera en poco las 100 especies (para más información, ver Actividad Científica – Atlas Ornitológico).

Y por lo que respecta a las plantas es, evidentemente, el mejor momento del año.

Premios

Una característica en la política de premios para estos maratones es la de recompensar no solamente a aquellos grupos que realicen el mayor número de observaciones. Esto dejaría fuera de la competición a grupos que, sin poseer unos grandes conocimientos, sí demuestran un gran interés y aplicación en la tarea. Por ello, a los premios absolutos, siempre acompañan otros premios, que buscan estimular la participación en estas actividades vinculadas con la naturaleza, y que no están relacionados con los conocimientos científicos.

Maratón ornitológico

El Primer Maratón Ornitológico, en la primavera de 2000, ofreció unos resultados espectaculares. El jurado aceptó como válidas la identificación de 81 especies distintas, muchísimas si tenemos en cuenta que las observaciones se hacían durante un solo día, y no en el horario más adecuado para las aves, que es la primera hora del día y el anochecer. Prácticamente se puede afirmar que todo lo que se podía ver o escuchar fue visto o escuchado.

La lista de aves observadas es la siguiente:

Somormujo lavanco
Zampullín cuellinegro
Zampullín común
Cormorán grande
Garza real
Cigüeña común
Cigüeña negra
Ánade real
Pato cuchara
Águila imperial
Milano negro
Milano real
Águila culebrera
Azor
Ratonero
Águila calzada
Buitre común
Perdiz común
Focha
Gaviota reidora
Gaviota sombría
Paloma torcaz
Paloma Bravía
Tórtola
Críalo
Cuco
Búho Real
Mochuelo común
Martín pescador
Abubilla
Pito real
Pico picapinos
Chochín
Totovía
Alondra común
Cogujada común
Golondrina común
Avión común
Avión roquero
Bisbita común
Lavandera blanca
Lavandera boyera
Lavandera cascadeña
Alcaudón real
Alcaudón común
Ruiseñor bastardo
Zarcero
Curruca capirotada
Curruca cabezinegra
Tarabilla común
Collalba gris
Collalba rubia
Colirrojo tizón
Petirrojo
Ruiseñor común
Mirlo
Agateador
Pardillo
Mito
Carbonero común
Herrerillo común
Herrerillo capuchino
Triguero
Pinzón
Jilguero
Gorrión común
Gorrión molinero
Estornino
Urraca
Cuervo
Corneja
Grajilla
Rabilargo
Verderón
Verdecillo
Curruca carrasqueña
Mosquitero común
Escribano montesino
Calandria
Alcotán
Cernícalo

Todos estos avistamientos (excepto zampullín cuellinegro, lavandera boyera, calandria y zarcero) han sido confirmados científicamente. No se detectaron en este maratón (fundamentalmente por la época del año y las horas de avistamiento), aunque también han sido confirmadas por ornitólogos de Proyecto Verde y Grefa, las especies siguientes:

Abejero europeo
Buitre negro
Gavilán
Lechuza
Autillo
Cárabo común
Búho chico
Chotacabras
Abejaruco
Carraca
Polla de agua
Paloma zurita
Tórtola turca
Vencejo común
Terrera común
Cogujada montesina
Avión común
Buitrón
Zarcero común
Curruca rabilarga
Reyezuelo listado
Carbonero garrapinos
Arrendajo
Gorrión chillón

 

Hay que aclarar que, sin duda, es posible ver otras especies, hasta llegar probablemente a las 140. Pero las reseñadas son las que han podido detectarse con total garantía, lo que no significa, volvemos a repetir, que sean las únicas, pero sí que son las que se pueden avistar con mayor frecuencia. El resto, hasta esas 140 o 150, son principalmente aves de paso, que excepcionalmente, pueden recalar en nuestro municipio, o aves que habitan en ecosistemas limítrofes con el nuestro o aves con grandes áreas de campeo. Un ejemplo es el águila real, que excepcionalmente se ha podido ver en nuestro municipio, aunque nuestro pueblo diste mucho de ser su hábitat idóneo.
Fuera de este inventario se encuentran las especies domésticas y en cautividad o semicautividad, como gallinas o gansos, por ejemplo.

Y a este respecto es divertida la anécdota sobre una lista de aves de Colmenarejo que ha circulado profusamente, incluso por Internet. En esta lista existen algunos errores importantes, como el cisne, especie que no puede ser avistada en Colmenarejo (ni en la práctica totalidad de España) en estado salvaje. El motivo del error es que la persona que realizó la referida lista observó una pareja de cisnes volando, cisnes domésticos que procedían del estanque que hay junto al Jardín de los Frailes, en el Monasterio de El Escorial, y que periódicamente hacen alguna escapadita por los alrededores.

En el Segundo Maratón Ornitológico, la cifra absoluta de avistamientos descendió a 77 especies, y alcanzó el récord en el Tercer Maratón Ornitológico, celebrado a comienzos de la primavera de 2002. En esta ocasión se avistaron 87 especies. Probablemente tuvo algo que ver el crudísimo invierno que padeció Europa, y que obligó a muchas aves a adelantar sus migraciones. Pulsa aquí para ampliar

 

Los premiados

Primer Maratón Ornitológico
• Primer premio: Emilio López, Antonio López y Carlos Ruiz (53 especies)
• Segundo premio: Rubén Úbeda, Alberto Rodríguez y Ricardo Panadero
• Tercer premio: Francisco Roales, Gonzalo Vigara y Francisco Javier Anaya
• Cuarto premio: Ana Rubio, Maribel Capó y Lucía Mora

Segundo Maratón Ornitológico
• Primer premio: Antonio López, Abel López y Daniel Serrano (55 especies)
• Segundo premio: Rubén Úbeda, Alberto Rodríguez y Ricardo Panadero
• Tercer premio: Arturo Almodovar y Daniel Rodríguez
• Cuarto premio: Francisco Roales, Gonzalo Vigara y Francisco Javier Anaya
• Quinto premio: Ana Rubio, Maribel Capó, Itziar Pérez y Lucía Mora

Tercer Maratón Ornitológico
• Primer premio: Alberto Rodríguez y Ricardo Panadero (70 especies)
• Segundo premio: Roberto Bastos y Jesús Gamella (62 especies)
• Tercer premio: Daniel Palacios y Raúl Gala (51 especies)
• Cuarto premio: Marisol García y Alfonso Zamora
• Quinto premio: Francisco Roales, Gonzalo Vigara y Francisco Javier Anaya
• Sexto premio: Arturo Martínez y Alejandro Martínez
• Séptimo premio: Ana Rubio, Maribel Capó y Lucía Mora

Hay que destacar la sana rivalidad que se ha creado entre algunos participantes habituales en estos maratones. El grupo formado por Alberto, Rubén y Ricardo ha estado luchando por el primer puesto hasta que, finalmente, lo consiguió en el Tercer Maratón. Esta última edición también destaca por los magníficos resultados, la participación y el hecho de que los premios fueron copados, por vez primera, por una mayoría de vecinos de Colmenarejo, y casi todos menores de 24 años, lo que significa que poco a poco estos maratones se van afianzando entre nuestros jóvenes.

2000, I Maratón Ornitológico

El 1er Maratón Ornitológico “Proyecto Verde” de Colmenarejo fue un completo éxito

Con una nutrida participación y unos resultados muy interesantes, este maratón ornitológico —tercero de este tipo que se celebra en España— promete convertirse en una prestigiosa cita anual para los aficionados de nuestro pueblo y de toda la región.

A las 10 de la mañana, en el Aula de la Plaza de Colmenarejo quedaba instalada la mesa de inscripciones. El adelanto horario —no previsto por la organización— cogió a muchos por sorpresa, por lo que hasta bien entradas las 11 no se animó la participación. Una vez desperezados y con un reconfortante desayuno en el cuerpo, la afuencia fué creciendo hasta alcanzarse los 21 grupos inscritos. El número de participantes por grupo era de tres, pero la mayor parte de grupos iban acompañados por amigos y familiares, por lo que la participación real puede cifrarse en torno a las 100 personas.

Los hubo de todas las procedencias: Galapagar, Valdemorillo, Las Rozas, Majadahonda, La Navata… algunos procedentes del entorno universitario, otros miembros de asociaciones ornitológicas y, sobre todo, vecinos de Colmenarejo.

Lo más alentador de esta primera edición fue la participación de niños y jóvenes, algunos con resultados verdaderamente espectaculares. El límite mínimo de edad para participar como inscrito lo había fijado la Organización en 11 años. Pues bien; de esta edad participaron al menos 9 niños, otros tantos con edades entre los 12 y los 15, dos grupos más con menos de 25 años y el resto de mediana edad. El techo de edad rondó los 60 años. Pero todos con un entusiamo y un espíritu envidiables.

Provistos de un poster con las especies más características del municipio, un plano para orientarse y marcar el recorrido y fichas para anotar las observaciones, los participantes recorrieron los caminos del municipio con mayor o menor fortuna, dependiendo de sus habilidades y del azar. Pero en lo que todos han coincidido en los comentarios que han hecho al finalizar la prueba es en el estupendo día de campo que han disfrutado en contacto con la Naturaleza. Una ocasión perfecta para pasar juntos —padres e hijos— una jornada de ocio.

Las zonas más visitadas fueron la zona del pantano de Valmayor y el río Aulencia, aunque algunos grupos —el vencedor y los tres accesit, entre otros— hicieron recorridos que solo de verlos reflejados en el mapa ya dan fatiga.

Y un comentario unánime de la gente que venía a Colmenarejo por vez primera: “Tenéis un municipio increible; ¡Cuidarlo!”

Mucho nivel
El primer premio correspondió, tal como se establecía en las bases, al grupo que realizó mayor número de identificaciones. El equipo ganador —de Galapagar— demostró un nivel extraordinario. Son tres jóvenes con larga experiencia en censos de aves y un historial de activa participación en asociaciones ecologistas.

Los restantes galardones se habían constituído para premiar otros aspectos de la participación distintos de las puras observaciones. Sin embargo, se da la circunstancia de que estos grupos, además de los méritos por los cuales se les han concedido los galardones, están entre los cinco primeros equipos en identificaciones y con una edad media de 14 años.

La labor del jurado
El jurado, formado por los biólogos Elvira González, Roberto Pérez y el presidente de Proyecto Verde, tenía como misión principal discernir la veracidad de las identificaciones. Algunas observaciones tuvieron que ser invalidadas, bien por falta de datos (citar sólo el género, o faltar la zona de avistamiento), bien por la dificultad extrema en la identificación (distinguir por el oído especies cuyo canto no es característico), o bien por tratarse de especies practicamente imposibles de ver en la zona marcada, o en la propia región o en la época del año.

Algunos avistamientos sorprendieron al jurado, como el caso de la cigüeña negra, el águila imperial o el azor, pero fueron dados por válidos al aparecer en otros grupos en horario y zona similares. En ningún caso se detectó voluntad de engañar, aunque sí errores debidos a la lógica inexperiencia.

Y ahora, ¿qué?
El éxito de público y la repercusión habida en los medios de comunicación (con la presencia de Telemadrid, apariciones en la SER, entrevistas en la COPE, portada en Diario 16, además de artículos en casi toda la prensa local y regional) ha movido a Proyecto Verde a instituir el Maratón Ornitológico como una cita que se repita año tras año.

Proyecto Verde agradece el apoyo de los patrocinadores (Ayuntamiento de Colmenarejo, Universidad Carlos III, Estanco de Colmenarejo, Autocares Julián de Castro y Centro Médico Colmenarejo). Ahora, después del éxito obtenido, serán muchas las empresas dispuestas a colaborar con nuestra asociación, pero para Proyecto Verde tiene un especial valor la confianza mostrada por todos estos pioneros.
Desde un punto de vista científico, los datos arrojados por este maratón serán divulgados en los medios especializados. También serán incluídos en el Inventario Medioambiental de Colmenarejo —que Proyecto Vede realiza desde hace varios meses— y, dentro de 2 ó 3 convocatorias, se podrá editar algún estudio más detallado sobre la avifauna de la zona que sea suficientemente representativo.

2001, II Maratón ornitológico

El pasado 31 de Marzo de 2001, Colmenarejo vivió el II Maratón Ornitológico organizado por la asociación Proyecto Verde, y patrocinado por el Ayuntamiento, con gran éxito de público y una presencia nutrida de medios de prensa escrita y televisión.

Como en la anterior edición, la respuesta de los aficionados a la ornitología fue excelente y 18 grupos se lanzaron, armados con sus prismáticos, a ver aves en una jornada que, por otra parte, fue estupenda desde el punto de vista climatológico.

Las bases del maratón ornitológico son muy sencillas; cualquier persona mayor de 10 años puede concursar y para ello debe inscribirse en un grupo de 2 O más personas y, sin salir del término municipal, intentar reconocer el mayor número de especies. La organización del maratón les suministra todo el material necesario: planos, fichas, una pequeña guía de aves e incluso un tentempié energético que obsequiaba Coronel Tapiocca, que colaboró en este evento, patrocinado por el Ayuntamiento de Colmenarejo.

Los mecanismos de observación son libres predominando, como es natural, los prismáticos, aunque algunos grupos también se armaron con teleobjetivos y telescopios terrestres, lo que sin duda les daba cierta ventaja.

Los resultados de la competición arrojaron un total de 77 especies reconocidas, destacando algunas tan importantes y emblemáticas como el águila imperial, la cigüeña negra, el azor, el búho real y el búho chico. El equipo ganador, compuesto por Antonio Ozaez, Abel López y Daniel Serrano, consiguió identificar 55 especies. Se da la circunstancia, de que tanto este equipo, como el segundo clasificado —compuesto por Alberto Rodríguez, Rubén Úbeda y Ricardo Panadero— ocuparon los mismos puestos en la edición del pasado año. La diferencia ha sido tan sólo de dos especies. Una anécdota que demuestra que además de grandes conocedores del mundo de las aves, Alberto, Rubén y Ricardo, son ante todo personas de una gran honestidad, es que con solo anotar dos especies que cualquiera de nosotros puede observar casi sin moverse de la plaza, habrían ganado el primer premio “ex aequo”.

Los tres accesit fueron para Arturo Almodóvar y Daniel Rodríguez (44 especies), al frente de un nutrido grupo en el que abundaban los biólogos, Gonzalo Vigara, Paco Roales y Fracisco Javier Anaya, con 36 especies y un recorrido que solo de verlo en el mapa dejó agotado al jurado, y Ana Haizea Rubio, Maribel Capó, Itziar Pérez y Lucía Mora, con 30 especies.

Enhorabuena a todos, premiados o no, porque el verdadero premio, el que nadie os podrá disputar y que tendréis siempre asegurado, es vuestra afición y amor por la Naturaleza.

El domingo 1 de abril, continuando con las jornadas ornitológicas, todos los amantes de la naturaleza pudieron visitar en el centro cívico la exposición ”Conocer las aves” que Proyecto Verde ha realizado con motivo de la entrega de premios del maratón.

La exposición se componía de varios paneles en los que se recogían distintos aspectos de las aves como nidificación, anatomía, tipos de plumas, las aves en la cultura, etc… También se exponían distintas maquetas y dioramas mostrando nidos de aves singulares y apostaderos, así como algunos de los elementos utilizados por aficionados y expertos ornitólogos, guías de aves, prismáticos, cepos de anillamiento, “hides” fotográficos…

Más de cien personas visitaron esta exposición que, por razones logísticas, no ha podido permanecer más tiempo expuesta en Colmenarejo. Nuestra intención es ampliarla y mejorarla y poderla exponer en cuanto las condiciones lo permitan. En la actualidad se encuentra expuesta en el instituto de El Escorial y está a disposición, de manera gratuita, de todos los centros de enseñanza de la zona que la soliciten.
Durante el acto de entrega de trofeos, Ángel Pérez, experto anillador del grupo Halcyon y miembro de Proyecto Verde, dio una amena conferencia sobre las aves de nuestro entorno, acompañada de una proyección de diapositivas, y respondió a todas las preguntas de los interesados por mundo de las aves.

Los miembros de Proyecto Verde ya estamos trabajando en el III Maratón Ornitológico y desde aquí os animamos a participar en el del año próximo.

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